A veces dicen que "cuando no sepas qué hacer, no hagas nada"; pero yo muchas veces no sé qué hacer y uno no puede pasar la vida cruzada de brazos porque justamente eso es lo que te pasa: la vida te pasa, no la haces, no la vives, no la decides. Te pasa. Está bien, es más facil, eres menos responsable porque tú no tomaste ninguna decisión, pero así como es más sencillo, es menos importante, menos trascendente. Es como vivir sentado en la carreola, tú no vas a ningún lado, te llevan. Así en carreola fui a Chiapas, aunque ese viaje no tuvo nada que ver con todo esto, o talvez sí.
Conocí a una de esas personas que creen en todo y a la vez, te das cuenta de que más bien, no saben en qué creer. Persona curiosa. El viaje estuvo lleno de contrastes. A ratos tuve que escuchar pláticas idiotas de tipos imbéciles. Fue mi culpa, I was eavesdropping. La conversación fue un ir y venir sobre qué reloj era más caro y si era más conveniente comprar el Patek Philippe estilo no sé qué, o el de colección. En fin, ¿qué podía esperar de estos juniorcitos? Por otra parte, estuve en una boda que fue más bien un desfile de hombres guapos. ¿Inteligentes, simpáticos? No sé, ni oportunidad de investigar. Iba de date de mi papá y su esposa, jajaja.
Por otra parte, ¡qué árboles! Probablemente esto no lo sabías de mí, pero me encantan los árboles; no las florecitas, no las plantas o la flora en general, sólo los árboles. Uno de mis favoritos es la higuera. Quiero una casa con muchos, talvez dos que tres jacarandas por ahí... La verdad quiero una casototota y también quiero una casita en Chiapas, en San Cristobal. Ah, también vi una iglesia que me encantó. Rara situación, casi no les pongo atención, pero ésta estaba escondida entre los árboles.
pd. No llevé ropa de frío y tuve que comprarme un suetercillo ahí hippiosón, estaba bien, pero olía a madres, a humedad, a perro. Al menos no me tuve que poner un faldón de borrego negro como las mujeres de San Juan Chamula; con esas faldas casi puedes levantar las piernas y quedar suspendida en el aire. Se ven más tiesas que las que usan las meseras de Sanborns
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